Andrés Sardá ha sido el protagonista en un 50 cumpleaños lleno de aires de cabaret, dónde los flecos y las plumas han puesto un valor añadido en los ya clásicos y sensuales encajes del diseñador.
Amaya Arzuaga acorta unos vestidos sujetos a sus habituales juegos de volúmenes.
y de estqa jornada me quedo con la elegancia de Juanjo Oliva
y con estos preciosos salones
No hay comentarios:
Publicar un comentario